
Maravilloso valle pirenaico que ofece al visitante un entorno variado y y completo para disfrutar la belleza de sus paisajes, pueblos y gentes.
Desde Sabiñánigo hasta El Portalet, (frontera con Francia), en el Valle de Tena se entremezclan, la inigualable belleza de sus paisajes, bosques, lagos e impresionantes picos, con la típica arquitectura de alta montaña, así como la completa infraestructura turística que acoge al visitante, asegurándole una estancia agradable
En invierno el deporte de la nieve es el rey de este Valle, con dos estaciones de esquí la de Aramón Formigal, una de las más grandes de España y en constante evolución y la de Aramón Panticosa una estación a medida para familias donde la nieve y el paisaje son impresionantes.
Desde el Balneario de Panticosa podrá disfrutar de paseos en raquetas de nieve o practicar esquí de fondo así como de rutas de senderos con mágníficas vistas y rodeados de paisajes maravillosos.
El museo de Dibujo del Castillo de Larrés (restaurado) y el Museo de Artes Populares del Serrablo, en Sabiñánigo, merecen una visita por su interés cultural y turístico.
Pero sobre todo descubra los rincones de sus pueblos y paisajes, ibones, excursiones, lagos, montañas, senderos….descubre el Valle de Tena en los Pirineos.
Biescas
Biescas se asienta sobre suelos aluviales y pardo-calizos forestales que permiten tanto una agricultura tradicional como la explotación maderera de montes comunales. Los cultivos cerealistas y de forrajes apoyan una ganadería de ovino y vacuno para consumo local. Aunque históricamente la población se ha dedicado a la agricultura, la ganadería y la artesanía, hoy en día Biescas constituye un importante centro de ocio y de actividades deportivas, tanto en verano como en invierno.
En sus proximidades se encuentra la Ermita de Sta Elena del s. XVIII colgada sobre un abismo o fortín militar del s. XIX.
Sallent de Gallego
Se encuentra a orillas del Embalse de Lanuza y al pie de las más altas cumbres de la cordillera, muy cerca ya de la frontera con Francia. Su término constituye la capital del Valle de Tena.
Típico pueblo del Pirineo aragonés, posee una iglesia gótica, de principios del siglo XVI, que alberga un valioso retablo plateresco. Inicialmente fue villa de realengo, pasando, posteriormente, a ser señorío laical de la conocida familia Lanuza.
La Foratata, un gran peñasco rocoso que se eleva sobre la villa, es el pico más emblemático del lugar. Otras de las cumbres importantes dentro del término municipal son Anayet, Tres Hombres, Arriel y Balaitous, alcanzando muchas de ellas los 3000 metros de altura. Estos paisajes ofrecen infinidad de posibilidades, especialmente la práctica de deportes de montaña y aventura. Son especialmente recomendables las excursiones a Ibonciecho y al ibón de Respomuso, lugar este último donde existe un albergue muy frecuentado por los alpinistas. El municipio está atravesado además por la GR-11, ruta de montaña que recorre la cordillera pirenaica desde el Mediterráneo hasta el Cantábrico.
Lanuza
De marcado estilo montañés, el caserío de Lanuza se arracima desde el borde mismo del embalse hasta la iglesia del Salvador, construida en el siglo XIX sobre un templo románico anterior incendiado en la Guerra de la Independencia y del que aún se conserva un crismón en la portada. Reabierta al culto, atesora entre otras obras de arte un relicario de plata fechado en 1557 en el que se exponen restos de Santa Quitería, patrona del lugar.
El compacto núcleo de piedra y pizarra, en plena rehabilitación, se proyecta hoy como pintoresco enclave turístico dentro del Valle de Tena, sirviendo además desde 1992 como marco al prestigioso Festival Internacional de las Culturas ‘Pirineos Sur’.
Formigal
La estación se divide en cuatro grandes sectores: Tres Hombres (Crestas), Sarrios, Anayet y Portalet. Cada zona es accesible en coche y mediante un servicio de autobús. La base de cada valle cuenta con un aparcamiento y un área de servicios, desde donde salen los telesillas.